jueves, 12 de abril de 2012


The space of music!!!!

Bueno, al teclado Borderlaine… no estoy muy acostumbrada a postear, pero éste es un pequeño inciso dedicado con mucho amor (no sé si se cogen las sutiles ironías, pero dicho está) al CNT y a todos los extremistas cegados por la convicción de que tenían razón, desde Hitler hasta Mao, me dan igual los colores, porque como decían Biff Bang Pow!, el único color es el amor, y en cuestión de extremos y radicalismos, ya no hay idea que valga, porque si dejas que el odio hacia un supuesto opuesto te ciegue, acabarás cayendo en ser la otra cara de la misma moneda, y haciendo lo mismo, pero en tu propio beneficio… sin ir más lejos, como los Skin heads y los Red Skin… ambos en una batalla predestinada desde el principio a perder.

Y ya que me dejan escribir en un blog de “locos”, me parece que “Loko” es un buen tema. No será la canción del siglo, pero el vídeo, ya que yo me centro en lo visual, es la leche… y con poco presupuesto.
A pesar de que las imágenes hablan por sí solas, me gustaría comentar cuatro cosillas: el vídeo es del 2003 aproximadamente. Sí, se editó paralelamente en el tiempo a la guerra de Iraq, y con razón.
El mensaje es el mismo: haz el amor y no la guerra; la guerra se acaba si tú quieres; es el fin de la violencia… se ha intentado de TODAS las formas, y siempre ha llegado un radical y se lo ha cargado todo. Y todo porque no somos capaces de ver más allá de una apariencia, que nuestra mente enseguida asocia con “bueno” o “malo”, y esa maldita asociación siempre tiene que ver con nosotros mismos. Sí, nosotros siempre somos los buenos, y el otro es el malo, y si no piensas como yo, que soy el radical bueno, el que le parte la cara a los fachas (o a los rojos), es porque estás loco y mereces que te partan la cara. ¿No os ha ocurrido alguna vez? ¿No lo habéis pensado alguna vez, sin llevarlo a un extremo tan… radical? ¿No hay, o ha habido, un pequeño radical en todos nosotros?
Criticamos que hayan muerto republicanos en la Guerra Civil, pero no criticamos que hayan muerto falangistas ni franquistas. Todos eran personas, y todos se merecían poder demostrar su inocencia, sin colores, y contar su historia. También ser escuchados. Todos nos lo merecemos. Figura en los Derechos Humanos, que tan olvidados están. Soy defensora del Medio Ambiente, pero ante todo de las personas, y es inhumano que, por defender los derechos de un animal, nos alegremos de que un torero sea corneado o un cazador muera cazando. Son seres de nuestra propia especie. Si pudiésemos salvar a un perro o a un humano, ¿a quién salvaríamos? Bueno, viendo cómo están las cosas, me temo que al perro, por lo que los humanos hemos forjado a pulso: el odio entre nosotros, entre nuestra propia especie. Sin ir más lejos, muchos recordarán a la niña china que murió atropellada, y por la que sólo se preocupó una chatarrera. Comparémoslo ahora con el caso de la cría de elefante que casi muere ahogada, y con la que toda la manada se sacrificó, exponiendo su propia vida hasta salvarla. Cuidar de otras especies está muy bien, pero el “especismo”, como han llegado a llamarlo algunos, no es el problema de la Humanidad. Todos luchamos por nuestros semejantes. El problema de la Humanidad es que no somos capaces de vernos a nosotros mismos como un conjunto, y ahí surgen los “ismos” que nos carcomen: racismo, sexismo (machismo Y feminismo), homofobia, nacionalismo… todo prejuicios contra nosotros mismos. ¡Eso sí es de locos!
A lo que iba: en el vídeo se ve a un pequeñín jugando con un fusil (no intenten hacerlo en sus casas, por favor). Una imagen muy significativa. Una vez vi un spot que me impactó muchísimo, tal vez porque tenía cinco años: “hay algo peor que ver a un niño delante de un arma, y es verlo detrás”. Ese fotograma no tiene más de qué hablar.

Ya he dicho que es un vídeo sin presupuesto, y se ve, para empezar, en la imagen de los soldaditos de juguete reptando. Era sólo uno, y lo multiplicaron en un mosaico informáticamente, igual que en la imagen en la que Murfila (que así se llama la cantante-diseñadora-realizadora-guionista de la pieza) aparece en medio de un corazón hecho con alambrada.
Todas estas imágenes son muy emotivas, pero la mejor es la parte en la que los izquierdistas-idealistas-radicales se vuelven seres violentos, intentando combatir la guerra con más violencia (vamos, terrorismo enmascarado de pacifismo). Los soldados están frente a frente con los civiles, en medio de una encarnizada lucha de gritos, en la que uno de los “pacifistas” intenta quitarle el fusil a uno de ellos para pegarle con él. Y ahí está Murfila, con sus grandes ojos negros, pintados aun de más negro, vestidita de azul y con botas militares, boquiabierta al no saber qué hacer: iba con los antibelicistas, sí, pero ahora se encuentra en medio de una protesta totalmente bélica, y en algún momento van a acabar matándose seguro. Sigue en medio, y llega un primer plano: agarra del cuello a un soldado y le besa. Sin más. Sin un “tú eres del otro bando”, ni un “¿cómo te llamas?”. Sólo le besa. Y todos acaban haciendo lo mismo. No creo que pueda considerarse ni tan siquiera erotismo, porque lo máximo que se ve es un poco de ropa interior. O tal vez sí sea erotismo, pero no pornografía. A lo mejor sólo es bonito, sin más etiquetas. O a lo mejor los “protagonistas” son sólo personas, seres humanos, por tanto animales, y los animales en general, los humanos en particular, necesitamos amor, cariño, contacto físico y espiritual, si es que existe eso del espíritu. Espero que sí, aunque sólo sea en el cerebro. Da igual, al fin y al cabo, somos personas que necesitamos unas de otras, sin más etiquetas.
Y dado que todos somos personas, los enfermos mentales que no han hecho nada a nadie tenemos derecho, tanto como los demás, ni más ni menos, a ser tratados como personas, como humanos, no como ¿Cuál era la palabra? Ah, ya. Apestados. O seres marginales. Me la suda, ninguno de esos calificativos me gustan.
Gracias por dejarme acceder un ratito a la Galería de las Sombras, me despido, y esta vez no es Francis Petrel (que espero que no sienta muchos deseos de matarme al leer este post, aunque da igual, porque antes debería localizarme) ni Lilith 322 la persona que lo hace, sino
Borderlaine (necesito una mano que me diga “todo bien. Vamos a darnos calor, tengo frío ¿no lo ves?, vámonos de éste caos, vamos a hacer algo mejor.
PERSONAS, ¡qué palabra más difícil de aceptar para algunos!
Love is the answer
(Lo siento, en mi ordenador hay una sobrecarga de imágenes de John Lennon. Piensa bien lo que dices, podrías equivocarte y pensar que aun tienes razón)